jueves, 20 de octubre de 2011

LAS PUERTAS ABIERTAS DEL NATURISMO (BRASIL).

Una de las riquezas de la manera naturista es, en efecto, la búsqueda de vida en armonía con la naturaleza, con los demás y con nosotros mismos. Un aprendizaje en el que, a lo largo del camino, no sólo descartó la ropa, sino también los muchos "basura ideológica" que nos distancia el uno del otro.

El ser naturista comienza cuando nos negamos a compartimentar nuestro cuerpo la creación de zonas tabú, zonas prohibidas para ser cubiertos, cerrados los ojos de los demás como si estuvieran sucios. También implica la aceptación de su propio cuerpo, sin el reconocimiento de los dolores que el tiempo escribió en nuestros cuerpos.

Este camino gana dimensiones en la medida en que el respeto por el otro gana concreces, cuando reconocemos e incorporamos los ideales del Naturismo, un estilo de vida que busca establecer vínculos entre las personas , sin diferencias sociales , edad, raza, cultura, religión y otros.


Amplias y múltiples son las puertas del naturismo, todos abiertos a la vida. Los naturistas, en principio, aceptar la diversidad. Son hombres y mujeres que tratan de crear un mundo mejor donde las personas puedan, en libertad, aprender el arte de vivir en armonía. No hay sectarismo, ninguna barrera ideológica, credo religioso o político, a obstaculizar la visita, el abrazo de la comunión fraterna.

En la vida naturista aprendemos que las diferencias individuales, debidamente trabajadas, nos enriquecen, propician la reflexión, rompen muchas reglas que niegan la vida, las cosas aprendidas en la infancia y que inhiben nuestra espontaneidad y la distancia el uno del otro.

Si queremos crecer - y esto es fundamental- no sólo intelectualmente, sino armónicamente, que se extiende afectos, tenemos que aprender de nuevo la vida. Esto sucede cuando cultivamos un nuevo tipo de relación que nos hace aceptar al otro como igual, ya sea cristiano o musulmán, negro o blanco, joven o viejo. No hay barrera, no hay connotaciones excluyentes o la distancia.

Respetar las peculiaridades de la vida del otro, siempre abiertas las puertas a la reunión. Como regla general, sólo la definición propuesta por la Federación Naturista Internacional (FNI) es ahora aceptada por todas las asociaciones afiliadas a la misma: "El naturismo es una forma de vivir en armonía con la naturaleza, caracterizada por la práctica de la desnudez en grupo, que tiene como objetivo promover la autoestima, respeto por los demás y el medio ambiente".

Yo entiendo que particularizar, abjetivar el naturismo - excepto cuando se trata de indicar la ubicación - sirve a la distancia, incluso si las intenciones son puras y simples. Es en cierto sentido, cerrar algunas puertas del Naturismo, privilegiando a algunos grupos dentro del movimiento. Con todo mi respeto, las doctrinas políticas, creencias religiosas y otros se quedan en la otra margen del río. Al Naturismo basta el elemento indicativo propuesto por la Federación Naturista, el vivir en armonía con la naturaleza, el respeto a uno mismo, el respeto por los demás y el cuidado del medio ambiente.

Para cumplir con los principios naturistas no es necesario dividir el movimiento. La inclusión es fundamental y esto ocurre cuando usted permite que las puertas se abran. El credo inhibe, limita o impide; el movimiento naturista es amplio unificador. La religión y la política pertenecen a la intimidad, el juicio de la conciencia de cada uno.

Los que deciden seguir el camino de los intereses naturistas de desarrollo personal, la aceptación plena del cuerpo (cuerpo-aceptación), un viaje que nos puede llevar al encuentro del otro. Importante caminar. Sin condiciones. Otras puertas nos esperan por adelante. Edson Medeiros Agosto 2010. http://www.evandrotelles.blogspot.com/ (traducción).

¡VIVA EL NATURISMO!

¡VIVA LA LIBERTAD!

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