NATURISTAS CONTRA "TEXTILES" (ESPAÑA)

Alemanes y holandeses adoran quitarse la ropa. España se debate entre las multas por ir en cueros y el rechazo de la ‘nudofobia’.

España casi podría presumir de moral victoriana con las cifras de nudistas en la mano. Un país pudoroso en lo que a estadísticas se refiere. Cierto es que unas 500.000 personas se han puesto alguna vez en público como Dios las trajo al mundo. Pero solo 30.000 son ‘militantes’ habituales. Y únicamente 3.000 están inscritos en la Federación Española de Naturismo (FEN). Un número irrisorio si se compara con los 60.000 federados de Holanda, los 50.000 de Alemania (con siete millones de nudistas habituales) o los 27.000 franceses. La recatada España. «La cifra de asiduos al naturismo aquí está en la media europea, en torno al 4%, pero hay países que se salen, como Holanda o Alemania, y nuestro número de federados es muy bajo», reconoce Ismael Rodrigo, presidente de la FEN.

¿Se imaginan a un hombre sentado en un banco del Retiro madrileño, leyendo plácidamente un libro y en pelotas? Seguramente acabaría detenido. En Alemania ocurre casi a diario. La imagen de ciudadanos en cueros en el Tiergarten, el parque central de Berlín (a tiro de piedra del Reichstag), entre niños jugando sobre el césped y parejas paseando a su perrito es tan habitual como aceptada. O familias enteras disfrutando de una barbacoa o un día de sol, desnudos, en los lagos cercanos a la capital. Entre los socios de la FKK alemana (Cultura del Cuerpo Libre) hay hasta sacerdotes católicos y pastores protestantes. «En los países mediterráneos apenas existe tradición. En parte, porque son muy religiosos», es el argumento de Kurt Fischer, presidente de la DFK.

Multas en Barcelona

Las encuestas dicen que solo alrededor del 4% de los españoles se opone «por sistema» a la desnudez. Pero Ismael Rodrigo lamenta que aún reine la ‘nudofobia’. «Es un miedo irracional, producido por una educación errada. Educar a los hijos en contra de su propio cuerpo, transmitiéndoles que hay partes vergonzosas, solo conduce a crear problemas de aceptación de su físico, necesidades de operaciones estéticas o riesgo de anorexia y bulimia».

Uno de los principales bastiones contra los cuerpos desnudos es, hoy por hoy, Barcelona. O al menos contra el seminudismo. La ordenanza municipal que impone multas de hasta 500 euros para quienes vayan por la ciudad enseñando más de lo debido lleva dos meses en vigor. Aunque, de momento, sin mucha tenacidad… Hasta esta semana, solo 37 personas habían sido sancionadas por ir ligeras de ropa por la calle.

Por contra, Almería sigue siendo el paraíso del nudismo. Al hotel Vera Playa Club (enclavado en el Playazo de Vera, cerca de la urbanización Vera Natura, de las mayores de Europa y donde sus vecinos pasean desnudos por la calle) se le unen un sinfín de playas nudistas, algunas de tan honda tradición como las del Cabo de Gata. En Vera nació este año el primer partido político naturista, el Inuna. Pero sus aspiraciones cayeron en saco roto en las elecciones municipales. Solo obtuvo 109 votos. Fuente: El Diario Montañes

¡VIVA EL NATURISMO!

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